SeaWorld: una aventura acuática
Texto: Ana Bouzas - Fotos Andrés Canet - SeaWorld Media
SeaWorld es uno de los paseos inevitables de la ciudad de Orlando, no solo por sus por poseer espectaculares atracciones llenas de adrenalina, sino que además es el lugar donde poder interactuar con los animales del mundo submarino y aprender un poco más sobre ellos. La idea es pasar un día donde la emoción, la adrenalina y el asombro hacen la combinación perfecta para un programa imperdible.
Cabe destacar que SeaWorld en los últimos años se ha esforzado en potenciar el rescate y rehabilitación de especies marinas, y colaborar con otros proyectos de protección animal en distintas partes del mundo.
El objetivo principal de nuestra visita era poder conocer las nuevas atracciones que en los últimos años ha incorporó el parque Infinity Fall, Mako, Sésamo Street Land las cuales no estaban en nuestra visita anterior.
El recorrido por el parque comenzó a pura adrenalina con Manta, una montaña rusa, que simula el nado de una manta raya en el fondo del océano, siendo esta la única montaña rusa de este tipo en el mundo. Y ya que hablamos de mantas el Manta Aquarium, nos permitió ver y tocar estas especies marinas tan sorprendentes.
Una experiencia que no habíamos tenido la oportunidad de hacer anteriormente era poder interactuar con los delfines en Dolphin Cove. Este brinda la posibilidad de tocar y darles de comer a estos juguetones delfines nariz botella. ( con costo adicional). Con una duración aproximadamente de unos 20 minutos pudimos aprender sobre ellos, hacerles hacer saltos y darles de comer. Una actividad inolvidable.
Continuamos el recorrido por TurtleTrek, Wild Artic, visitamos los acuarios y subimos a Kraken, la montaña rusa ambientada en una bestia mitológica submarina suelta en las profundidades del mar.
Pero como dijimos anteriormente nuestro objetivo era ver las nuevas atracciones, y hacia allí nos dirigimos. Junto al Shark Encounter nos esperaba Mako, la montaña rusa más rápida y alta de Orlando. No basta con apreciar su inmensidad desde abajo, sino que hay que subir para sentir el vertido y adrenalina los cuales se sienten durante los casi tres minutos que dura el juego. Este al igual que Manta, simula ser otro animal marino, el peligroso tiburón Mako que surge del agua a gran velocidad, para la enfrentar las profundidades del océano y cazar a su presa. Para nosotros un placer darnos el gusto de montarla.
Infinity Fall nos ofreció un recorrido en balsa por un río, que simula ser el amazona, el más largo y caudaloso del mundo, la experiencia dura alrededor de 5 minutos en los cuales nos sumergimos en un ambiente de corrientes rápidas y saltos bruscos para terminar en una vertiginosa caída de 12 metros de altura. Aquí nos asegurando diversión, adrenalina y sobre todo bastantes chapuzones.
Por último, pero no menos importante, nos dirigimos a Sésamo Street Land, el lugar para los más chicos, una zona de juegos diseñados para ellos, donde encontrarás montañas rusas, carrusel, plaza de juegos entre otras atracciones. Además aquí se podrá interactuar con los personajes de Plaza Sésamo, bailar con ellos y sacarse fotos.
Además de las atracciones, SeaWorld brinda varios shows que valen la pena asistir, así como también buenos restaurantes, tiendas de recuerdos donde poder llevarse algún animalito de peluche.
Si te gustan los animales marinos y la adrenalina, éste es un parque que no deberías dejar de visitar el cual también te dejará recuerdos inolvidables.•
